Descubrimiento de las pinturas rupestres de Torrecilla de alcañiz
Con motivo de las preguntas y correos recibidos, a continuación comento explico brevemente la historia del descubrimiento de las pinturas rupestres de Torrecilla de Alcañiz
“Aún
no comprendo como aquel día tomé esta pequeña carretera,
desviándome del recorrido habitual, ni porqué, estas moles de roca
nos atrajeron de tal forma, hay miles de lugares parecidos a este en
la comarca, pero fue precisamente en este en el cual nos detuvimos,
algo, alguien, o alguna fuerza de naturaleza que desconocemos o
extraña conexión fuera
de los habituales sentidos nos llevó hacia allí, para descubrir el
mensaje plasmado en una cueva, dejado miles de años atrás por
alguien que quizás se preguntaba lo mismo, o bien tenía el
conocimiento y dominaba esta fuerza o energía. Tengo la seguridad de que no descubrí las pinturas rupestres, más bien ellas me encontraron a mi, ...me llamaron”
Era
un frío día de invierno, 18
de Enero del 2013, sobre las 11 de la mañana me dirigía hacia una
zona del río Martín en compañía de mi pareja, para realizar una
serie de investigaciones en unos estrechos, pero en vez de ir por la
carretera Nacional que pasa por Alcañiz, seguí otra pequeña
carretera, no supe el porqué, simplemente tomé otro itinerario.
Pasado
el pueblo de Torrecilla de Alcañiz, mi Pareja Nica y yo, estábamos
inmersos en una conversación mientras conducía, y de repente nos
quedamos callados, algo a nuestra derecha pareció atraer
profundamente nuestra atención. Era extraño pero los dos tuvimos el
la misma sensación, allí cerca de la carretera, observamos unas
singulares formaciones rocosas que parecían atraernos
irresistiblemente. Se trataba de unas elevaciones de conglomerado de
piedra, que formaban barrancos o cortados verticales en forma de
muro. Estos peñascos castigados y modelados por el implacable poder
del viento, parecían ser estatuas que nos contemplaban desde lo alto
poseyendo vida propia. Una de ellas recordaba a una cabeza, en forma
de esfinge, en ella se vislumbraba un agujero natural por el que
pasaba la luz a modo de un gran ojo.
Detuve
el vehículo y fuimos andando hacia las peñas rocosas,
sospechábamos que en sus entrañas hallaríamos algún vestigio o
restos de actividad humana, ya que en este tipo de peñascos se
solían encontrar petroglifos, o restos de construcciones antiguas.
Mientras
mi pareja contemplaba el lugar buscando algún indicio, me separé
unos metros escalando con bastante dificultad una de estas moles de
piedra, ya que el acceso más fácil estaba bloqueado por vegetación
arbustiva, y allí en una pequeña cueva, vi lo que parecía un
friso, acto seguido me acerqué para ver si había algún gravado o
dibujo, al acercarme y observar detenidamente, vi lo que a simple
vista aparecía como una figura humana, estaba pintada en rojo
oscuro. Al rato de estar allí pude darme cuenta del fenomenal
hallazgo, sin duda habían varias figuras de lo que parecían
pinturas rupestres, fue algo mágico y asombroso, cuando más tiempo
estaba en la oquedad, mas pinturas parecían mostrarse ante mi, allí
había algo importante, algo que de alguna manera nos llamó o
dirigió hacia allí, Me quedé un rato absorto en lo que mis ojos
contemplaban, estaba inmerso en una especie de trance, lo más
parecido a un estado de meditación profunda, llamé a Nica para que
viera lo que había descubierto e inmediatamente tomé fotografías
en alta definición de los detalles así como planos generales, anoté
y gravé las coordenadas del GPS, tomé medidas y orientaciones con
la brújula.
Había
figuras incompletas, con lo cual decidí ir a casa a buscar
información, y alguna referencia sobre el hallazgo, así como
empezar a analizar las fotografías con detenimiento, ya que en el
lugar no quise ni siquiera tocar el friso por posible contaminación
o deterioro, la misma grasa de los dedos puede alterar una prueba de
carbono en la datación.
Al
observar las fotografías me di cuenta de la importancia del
descubrimiento, a lo que me dispuse a investigar y a aplicar mis
conocimientos en tratamientos de imagen digital con el fin de obtener
un calco y así poder averiguar lo que estaba dibujado en el friso,
obtener una datación aproximada y una posible interpretación, y
allí llegó la sorpresa
Durante
los trabajos de la obtención del calco, realmente no sabía a que
parte pertenecía la porción ampliada de la imagen que trabajaba, ya
que generalmente al escribir y trabajar estoy bajo estado de
meditación, a un nivel de concentración y percepción muy elevado,
gracias a las técnicas aprendidas de diferentes lamas y maestros.
Por lo que al ver el resultado obtenido, es decir, el calco, allí me
llevé una gran sorpresa, lo que contemplaban mis ojos era el
mismísimo cuadro pintado hacía miles de años por alguien, con una
forma de conocer y comprender el mundo muy distinta a la nuestra.
Me
di cuenta de la importancia del hallazgo por lo que me puse en
contacto con mi amigo Miguel Giribets, para asegurarme de lo que
veía, tener una opinión de un experto como el, y me asesorase para
ver la forma de comunicarlo a las autoridades o expertos, En pocos
días confeccionó un magnífico informe de la investigación realizada y posteriormente se envió
a a las personas y organismos oficiales.
No hay comentarios :
Publicar un comentario